Se utilizaron diversos materiales para fabricar armas y herramientas:
Piedras de diferentes tipos, calidad y durezas, generalmente obtenidas del entorno geográfico del grupo social correspondiente, aunque en algunos casos los materiales provienen de otras áreas geográficas, posiblemente conseguidas por comercio u otras formas de apropiación. La característica del material, mayor dureza, mejor presentación, mejores condiciones de elaboración, etc.
En el caso del actual territorio boliviano se desarrollaron las técnicas de tratamiento del cobre, aleaciones para obtener el bronce y aparentemente rudimentarios conocimientos en la utilización del hierro.
Los testimonios de estos materiales no son frecuentemente encontrados, las condiciones de conservación de descomposición que presentan como restos orgánicos hacen que su conservación sea limitada.
Han subsistido principalmente los testimonios de hueso que suelen ser resistentes a la descomposición, no así otras partes como la piel, el cuero, cuernos, tendones de extremidades, pezuñas, etc.